En la tormenta.


«Bendito sea el caos, porque es síntoma de libertad» 
(Enrique Tierno Galván)


3:13 am.
Buena hora para terminar uno de mis trabajos para filosofía. Y no, no, aún no he perdido la cabeza (aunque pueda parecer que poco me falta) Escribía textualmente en mi trabajo: 
"A diferencia de lo que a priori muchos puedan pensar de esta frase, no es una incitación a la rebelión o a tomar la libertad a la fuerza, más bien es una llamada al aprendizaje. Y al modo en que cuando el caos nos hace ir de un lugar a otro de nuestras emociones, sepamos encontrar a través del aprendizaje y el raciocinio, el modo de ser nosotros mismos y luchar por aquello en lo que creemos justo. ¿Acaso no es eso un claro síntoma de libertad?"

Y sí, si  te soy sincera, elegí el aforismo de arriba para mi trabajo de filosofia del nuevo trimestre, por dos razones. Una: porque lo empiezo en cuarentena y vía online... (y luego te explico) y dos: porque justamente el dia de hoy ha sido un PUTO caos. Lunes, arranqué el día teniendo que salir a por pan, y leche, (de lo segundo no encontré) por el contrario casi le tengo que atizar de hostias a un tipo que se creía que tenía más huevos que nadie y al que bien sabe Dios tuve que hacer de un autocontrol de los de un par bien puestos pa' no ponerlo en su lugar. Al llegar a casa mi padre que como entiende el mundo a su estilo desde que le dio el ictu, pues... imagina cómo ve la actualidad que lo único que hace es ver tele y noticias sensacionalistas. A eso se une la bomba del día... y no, no es esa de: Booooooooommmbaa! No, esta ha sido para todo menos para bailarla. 

Los niños empiezan sus clases virtuales por Moodle. Que no han abierto una plataforma virtual en su vida (o eso me lo ha parecido mi) Un trillón de deberes que les habían puesto para ser el día de arranque. Y eso que por el grupo de Whatsapp unos a otros se confirmaban que los profesores no habían subido nada. (Ayyy, como comprendo a mi profe del año pasado de sociales y por qué decía aquello de los grupos de Whatsapp). El caso es que a estas horas tenga el culo plano. Y debo de ser por lo menos cuarto y mitad masoquista para estar aquí escribiendo aun. Porque lo cierto es que desde que terminé de hacer las torrijas (eso es otra de las de hoy lunes) el viejo lleva tres días diciendo que quería comer torrijas... el no entiende de corona virus, ni leches... y allá que me puse yo con to' eso(...) ha hacer torrijas. Para después no almorzar y sentarme hasta la hora de ponerme de nuevo en la cocina, para entonces con la cena, y hasta ahora. Todo el puñetero día con los deberes, clases virtuales a través de videos y peleas de hermanos. Porque para más INRI a esto de no poder salir de casa, al miedo colectivo social frente a la amenaza del virus y a que tengo examen doble mañana y no he podido tocar unos apuntes... solo tenemos en casa mi portatil. ¡¡Madreeee!! Esto no se lo deseo yo a nadie. Al virus puede que sobreviva... a compartir el portátil con mis hijos y hacer de intérprete a todo lo que suben los profes... ya no estoy tan segura.  

Me acordé del 50% de los memes que me han llegado por las redes sociales, porque claro, el otro 50 ni me ha dado lugar de mirar. Y de uno que decía: que ahora entendía a los concursantes de Gran Hermano... y que nominaba a su marido. Pues qué quieres que te diga, yo hoy hubiese nominado al mío, pero el día que se le ocurrió decir que quería ser padre. (Lucy mi vida, tú sabes que yo te quiero, pero hija mía... qué jartible eres a veces). Y aún así pese al agotamiento físico y psíquico, pese a todo lo que hay ahí fuera liado y a la incertidumbre de qué pasará mañana. Justo ahora me relajo mirando mi móvil en este acogedor silencio de la noche (todos duermen) y miro una vez más los vídeos que me ha mandado mi hermana de mis sobrinos, y escucho los audios. Y sé que en mitad del caos de esta tormenta y de un millón más de ellas, la libertad de elegir siempre será una posibilidad a obtener un bien que nos hace desarrollar esas capacidades innatas que poseemos. Como la paciencia de una madre (en mi caso que no tengo ni para pegar un sello) o como el ingenio de mi hermana, que con cuatro niños y el mayor de seis años, metidos en menos de cuarenta metros cuadrados de vivienda, afronta estos días. 

En el caos surge la oportunidad de aprender, de reconocernos, de poner en práctica, de cometer errores, de repetirlos y hasta de llegar a aprender de ellos antes de que nos partamos la crisma de atizar el cabezazo siempre al mismo punto. A todos los que hoy lidian con hijos encerrados en casa: ánimo!! Porque no estáis solos, sí que es duro a ratos, pero tenemos lo mejor que puede pasarle al ser humano, la capacidad de desdoblarse por otros, de salir de uno mismo y poder vernos desde fuera, y vernos también en ellos.

Os dejo el audio de Whatsapp de mi sobrina diciendo porque no puede salir a la calle. A mi escuchar esa vocecita me da la vida literal. Y me muestra en mitad de esta tormenta un camino a la libertad y la sensación de paz que proporcionan los rayos de luz penetrando las nubes. 




Marichu. Una vez más eres el orgullo de tu hermana mayor. Eres la mejor madre del mundo, mamá reventaría de orgullo si estuviera viva. 

Comentarios

  1. Emoción pura, te juro.
    Y no digo más que vos ya sabés todo.

    Un abrazo enorme.

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    1. Pues eso...
      Tenemos la tecnología, que nos facilita la posibilidad de acercamiento. Lo demás, sigue siendo puro aprendizaje.
      Abrazo de 🐻😘

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  2. Leo estos días muchos comentarios sobre lo bien que han controlado la pandemia en China, como son un ejemplo a seguir por el resto y me asusto, mucho. Las medidas que han adoptado son el sueño húmedo del gran hermano omnipresente en todas las vidas..

    Supongo que es algo muy humano, ¿no? en cuanto nos asustan un poco estamos deseando que alguien nos proteja aunque sea a costa de entregar la poca libertad que nos quedaba...

    Tiempo extraños, sin duda.

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    1. No sabria que decirte (porque igual parezco una insensible) tengo mis puntos de vista que por regla general son bastante claros, pero soy realista y sé que tan solo son los míos. Suelo soñar despierta precisamente para controlar todo lo que sueño, si las cosas se complican las soluciono yo, y si no puedo solucionarlas, preparo a los míos para que se atengan y nos les coja de sorpresa lo que vaya a acontecer.

      Pienso que si es necesario tener razones para creer. ¿En quién? Esa es la pregunta del millón. Yo creo en la capacidad de sacrificio, en que se puede dar la vida por lo demás sin esperar y sin necesitar un cambio de moneda. Creo en el modelo de Jesucristo: "ama a tu prójimo como a ti mismo". (Aunque a veces como soy persona, me den ganas de partir la crisma al más próximo).

      Nuestro sistema económico va a sufrir un varapalo de cojones... pero la libertad y la responsabilidad individual de cada uno, es deber de todos, independiente a los tiempos que corren o a las medidas que tomen los que están más arriba en la cadena de poderes.Yo educo a mis hijos en principios básicos: protege al débil que te pille más cerca.

      Cuanto más extraños sean los tiempos, más abiertos debemos de tener los ojos.

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  3. Que tal Mento!
    Me encanta la foto de la entrada.
    Impagable la voz y la risa de tu sobrina tratando de pronunciar el palabro...jeje ¡Que bueno!
    Venga, a seguir adelante, animo!

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    1. Hola!
      La foto es la de mi trabajo de filosofía, que por cierto me falta buscar de quién es. Estuve a punto de subir un video de mis sobrinos, pero era demasiado tarde para hacerlo sin el permiso de sus padres. Y ese audio, jajaja, luego me envió otro seguido que intenta decirlo bien, pero al ver que no es capaz usa el nombre real y dice que así es más fácil, es graciosisimo oirla tan seria decirlo, después de lo que lia para desenredarse.
      No nos queda otra, ánimo!!

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    2. Ahora esas pequeñas cosas son como el aire que no puedes salir a tomar y colorean por un ratito tu mundo.

      Besos

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    3. Pues sí. Soy de vivir el instante, me ha costado y me cuesta vivir con esta filosofía, no es fácil, hay que trabajarla día a día y a menudo sale ya con normalidad. Y para vivir el instante, estos pequeños detalles son indispensables.
      Un abrazo y avancemos minuto a minuto. 😊😉

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  4. Oh! esa vocecilla y esa risa, para comersela, que ricura!!! La he escuchado varias veces...
    ¿Cuatro niños en cuarenta metros cuadrados? Un altar para tu hermana! 😊
    Besos.

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    1. En verdad Laura, son muchos menos metros. Viven en un estudio para estudiantes, una sola habitación donde tienen una cama litera de matrimonio (que mi cuñado ha soldado) y un sofá para dormir los seis. La cocina en un lateral de la habitación y un pequeño aseo con ducha adjunto. Mi niña es una super mamá de las de verdad, aunque haya gente que piensa que está loca por tener cuatro hijos con su situación económica. Lo cierto es que cada persona prioriza sus razones para ser feliz, y mi hermana ha sabido elegir, en mi opinión, la mejor de las opciones. Yo desde luego no podría, es con dos... y van a conseguir en esta hecha de confinamiento lo que no ha conseguido el tiroides... que me quede calva... jajajaja...
      Besos, guapa, y a cuidarnos todos!!

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  5. Hola! Primera vez que paso por acá, proveniente del blog de JLO.
    Interesante reflexión. Remarco lo que decís en el anteúltimo párrafo, sacar algo del caos, aprender, saber disfrutar de los próximos viajes, reflexionar, instruirse con lo que tenemos a mano, y por supuesto saber que esto es pasajero, que aunque estemos hoy solos, no lo estamos

    Saludos. Me quedo por acá.
    Te sigo

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    1. Ey! Estuve hace unos días en tu blog ojeando unos post desde enlaces del blog de JLO, esos de las barajas. Estoy deseando que se acabe el confinamiento para fotografiar las que me encuentre, jajaja...
      Y sí, si no conseguimos aprender de cosas como estás es ya pa' matarnos a pellizcos.
      Eres bienvenido a mi rincón de la blogosfera.
      Saludos!!

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  6. yo que pensaba que esa foto era lo mejor hasta que leí lo que escribiste y después el audio de la niña... me parece que es mucho para una entrada ja... te felicito, saludos desde Argentina y a pasar estos momentos aciagos como mejor podamos...

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    1. Suelo escribir los post casi como mucho de lo que hago en mi vida... a golpes de impulsos. Ni planifico ni ná, se que siento, busco sobre la marcha como exponerlo y allá va... esa imagen me encantó para mi trabajo de filosofia porque me sentía justamente así. Y estaba cansadísima por la hora que era, pero me gusta cuando me siento así venir a este rincón de pensar y dejarlo por escrito por si más tarde ayuda a alguien. A mi a menudo, me ayudan mucho lo que contais otros.
      No nos queda otra, esto es una experiencia que quedará para la historia y ojalá muchos podamos ser testigos y seguir contando en el futuro como lo vivimos...
      Saludos!

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  7. Un abrazo.
    Ahondemos dentro de la libertad.

    Besos.

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    1. En la libertad honesta, la que tiene derechos y obligaciones siempre ;)
      Un abrazo.

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    1. Te lo he pasado por email. Es mi sobrina Carolina (cinco años) dice: Tita ya sé porque no podemos salir porque está el coronavirus. Y se traba en el nombre varias veces :))

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    2. Gracias.
      Qué risa tan vital y contagiosa.

      :)

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    3. Es curioso ¿verdad?... los niños casi siempre consiguen devolvernos con su ingenuidad a ese instante de reconciliación con nosotros mismos.

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