OBJETIVO 22 DE JUNIO: ¿Qué demonios me pasa?

"Ningún conocimiento humano puede ir más allá de su experiencia"

(John Locke)

     Joder! Estoy de una mala leche... que no veas. ¿Qué me está pasando? Tenía el tema más que machacado. El examen a sido una pasada de fácil (es por lo que más cabreada estoy, lo admite mi ego). Yo estaba super tranquila. Para como soy de rabo lagartija, estaba como una tila, en serio. Llegué al I.E.S Virgen de Valme con la hora en el culo, para no variar el ritmo al que mi nueva vida me tiene acostumbrada ya. Mis compañer@s de clase me recibieron super guay ya que el día anterior no había asistido a las clases. Eso me hizo ser consciente del cariño que me tienen, y qué quieres que te diga, oye... que eso se agradece. Es curioso como los individuos nos agrupamos y aportamos valores al grupo ante una situación común. Me sentí muy a gusto, sobre todo porque si pude observar alguna mirada de recelo de quien me miró como diciendo: ahí está, esa es la que se lo responde todo en el foro de la plataforma. ¿Qué quieres que te diga? Ya lo dijo Villalonga, lo que no está en la plataforma no existe. Y yo necesito la nota, porque luego me pasa como hoy a la hora de los exámenes. Y la verdad es que no lo entiendo como con la edad que tengo me pasan estas cosas. Ojalá solo sea por estar en el principio, porque si no... puff... se me caerán las tetas y hasta los dientes yendo a clases de ESPA. Porque lo que está claro es que el certificado de secundaria me lo saco yo, así me lo tengan que dar por pesada con la jubilación. 

     

     Un amigo mío psicólogo dice que lo que me pasa es consecuencia del fuerte estrés que padezco y que me dan brotes de pánico. Ni que fuera un broboli echando hijos, pero imagino que tiene mucha parte de razón. Después de lo de mi madre y todo lo que ha venido detrás, llevo tanta carga emocional y tantas responsabilidades que sacar adelante que... puede que no sepa ya ni como hacer mis cosas, las que de verdad son mías o para mi. Y cuando me encuentro ahí, en el justo momento, la mente se me cierra. Vamos... que me quedo en blanco. Yo, si yo, la maruja de los recursos. La que no se calla ni bajo agua y cansaría hasta al mismo demonio. Pues manda cojones, sí... yo... me quedo en blanco. ¿Sabes lo que es que la mente se te pille? ¿Qué quieras hacer o decir algo y descubres que no hay nada ahí dentro a que echar mano? Es horrible. A mi eso nunca me había pasado, pero nunca de... de nunca jamás en la historia de mi retorcida vida. Nunca me he sentido en standby knock-ou porque así es como me siento en esos momentos. 

     Nadie es infalible. Tarde o temprano, cuando menos te lo esperas surgen imprevistos que ponen en funcionamiento todos tus engranajes y te empujan a agudizar el ingenio y la capacidad de tirar de experiencia para no morir en el intento. Aún no sé si la nota que he sacado me va a complacer o me voy a tirar de los pelos, jejj. Lo que tengo claro es que en la adversidad es donde el ser humano más explota sus recursos de superación, y la experiencia me dice que una batalla perdida no da por vencida la guerra al enemigo. Así que... leña al mono que es de goma y que salga el sol por Antequera (.)

     

     Y a ti, que se que recién me lees y que estás tan jodid@ con el tema como yo... ¡¡¡Ánimo!!!! Las cosas no son como empiezan, sino como terminan y lo que aportan al cómputo de toda la trayectoria.