AL ALBA.



La noche sugiere, no enseña.
La noche nos encuentra y nos sorprende por su extrañeza;
ella libera en nosotros las fuerzas que, durante el día, son dominadas por la razón. 
BASSAI (Gyula Halász 1899-1984)

     Me gusta esta frase de Bassai, pues define los amplios espacios que paso en la noche de mi ser. 
     No podría caminar al alba sin la experiencia de ver en la noche las sombras dibujadas de mis fantasmas. Todos tenemos monstruos bajo la cama. El enemigo es audaz, camaleónico, esperando entre las pequeñas parcelas de grises que nos habitan. El enemigo se esconde y espera, es paciente, nos observa esperando el momento apropiado según vaticina del estudio detallado de su observación continua sobre nosotros. Cuando conoce hasta la última de nuestras debilidades ataca con toda su artillería y una estrategia de invasión que nos puede dejar desarmados si no sujetamos con fuerza la cruz en nuestros manos.

     La noche despierta y libera los sentimientos, todos sin excepciones y es ahí en esa pausa de horas donde el preámbulo del alba nos ampara el momento en que nos enfrentamos al examen más difícil de nuestra carrera. 
    Ese que tiene todas las preguntas que ya conocíamos de antemano, ese que podemos responder en la privacidad de nuestros silencios y que al concluir... Nos sorprende exigiendo que seamos uno mismo quien evalúe y conceda la nota de aprobado. Ese es el momento culmen de la noche, la explosión de la luz del alba que ilumina nuestras respuestas, que destapa la realidad de las sombras que a veces ocultamos y que otras en cambio nos ocultan...

     Una vez le pregunté a mi ángel porque me dejaba siempre sola al caer la noche. Su respuesta me desarmó, me dijo que él nunca me dejaba. Ni aún en mis bajadas cuando me precipitaba hacia lo más ruín de mis elecciones, allí estaba en silencio acompañándome. Me dijo que la noche es mía, que en la noche no puede aconsejarme, solo estar y sujetarme justo antes de ser vencida si llega ese instante. "Hay espacios de libertad en los que no puedo ayudarte, solo observar como utilizas lo aprendido y lo pones en practica".
     Me habló de su misión de estar en esos momentos, observar mi progreso o mis momentos de paradas y prepararse él también para aconsejarme al llegar el alba. "No olvides que ellos si tienen el campo abierto en esos momentos y si encuentran una fisura colaran sus influencias para hacerte caer" 

   Aún así, las elecciones siempre son propias. No hay libertad sin responsabilidad. Paz sin una guerra contenida. Bien si un mal que aceche. Luz sin oscuridad que la refleje.


     Y al alba...  La Resurrección de la promesa cumplida que nos alienta el resto de horas en penumbras.