L@S HIJ@S PRODIG@S DE MI PADRE.


     Cuanto más conozco a Dios, mayor es mi grado de capacidad de sorpresa.
    Es algo muy raro, una piensa que cuanto más conoce el sentido de las cosas, la mecánica y lo que puede ofrecer una persona, circunstancia, ect... Menos capacidad de sorpresa se tienes. Con Dios, ay , con Dios es completamente al contrario y es algo que me encanta y me fascina. Me hace sentir como la niña que fui, tremenda mente curiosa, ansiosa de saber el porque de todo. Conocerle despierta en mí un impulso primitivo y esencial interno que me devuelve a la vida y me siento tan sorprendida, tan expectante, tan...TAN... Que me quedo sin capacidad de poder explicarme.

     La semana pasada viví una experiencia que me ha hecho una vez más sentirme así y tan agradecida. Tengo una amiga de mi niñez, mi mejor amiga desde los cinco años y como una hermana. En los dos últimos meses han pasado cosas en su vida que no es este el lugar para compartir, pero que yo que lo estoy viviendo por mi relación de amistad con ella en primera persona, no puedo dejar de maravillarme. Viendo como Dios se la apaña para trabajar y hacernos llegar su cariño infinito. A veces son situaciones tan inesperadas como la que va aconteciendo en este tiempo en la vida de personas tan cercanas a mi, tan alejadas en geografía, pero que por una voluntad de Dios que a menudo no somos capaces de comprender sucede y... Dios se manifiesta en todo su majestuosidad. 

     No sabemos que nos deparará el destino. A veces tenemos la sensación de que nuestra vida es un puro fracaso y vamos de un tropezón en otro, con las rodillas sangrando y mil cicatrices dolientes. Y de pronto del modo menos esperado todo parece coincidir, una alineación extraña, invisible pero tan palpable que hace que personas, situaciones, acontecimientos se compenetren y suceda. Y ahí detrás de todo eso está Dios. En su Persona más visible, Jesucristo. Esperando que nos demos cuenta y que lo miremos a los ojos un solo segundo para que en esa penetrable mirada con que nos mira descubramos quienes somos definitivamente y quien es Él. Y entonces cuando le descubrimos ya no nos importará el camino que hubo de ser andado y las caídas y todo lo que quede atrás. Jesucristo se encargará de dar un nuevo sentido a todo lo vivido y abrirá un nuevo camino con infinidad de oportunidades para hacernos feliz.

     Mi amiga la semana pasada vino a mi parroquia, se confesó y comulgó. Este domingo a vuelto a venir conmigo a misa. Y ya hemos quedado para el que viene volver a ir juntas. Dentro de nuestra amistad es otra experiencia a vivir y compartir juntas. Pero lo más importante es que sin importar que acontecimientos la han empujado a volver. Ahí estaba, temblorosa y algo nerviosa justo antes de entrar en la oficina con D. Ignacio, con el cual ya había hablado yo anteriormente, explicándole que desde que en el 83 hicimos la comunión ella no había vuelto a los sacramentos.  Cuando salió después de recibir el sacramento de la penitencia, su rostro resplandecía, sentí una inmensa alegría y mientras ella de rodilla frente a mi Amado rezaba y cumplía la penitencia impuesta, yo lloraba pero de alegría. Una vez más se cumplía en mi vida y era testigo del evangelio del hijo prodigo. Pero esta vez yo no era ese hija, ni tampoco el hijo mayor envidioso, yo era una sirviente más, alegrándome por ver a mi Señor contento de ver el regreso de otra hija a su casa. Dando gracias por poder ser testigo de aquello y pidiendo con todas mis fuerzas al Espíritu Santo para que se mantenga vivo y activo en mi amiga y la ayude a permanecer en la Iglesia y a conocer a Jesucristo. 

Comentarios

  1. Este es nuestro destino, dice San Pablo: "Dios nos ha predestinado a la alabanza de su
    gloria" cuando? sólo Él lo sabe.
    Dirá Santa Teresita del Niño Jesús: "Dios es mi amante y mi amado"

    Todas las almas buscamos a Dios, de alguna manera, Él se hace el encontradizo, solo eso, porque nos (me) ama infinitamente con el Amor más sublime, que uno pueda experimentar.
    "Dilectus Meus Hihi et Ego Illi" Todos somos para Él, es el la gratuidad de Dios.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ay María, cuanto más conozco a este Dios, amigo, amante, amado de mi alma, más me gusta. Más le deseo, más quiero parecerme y ser como Él, mayor son mis ganas de corresponder aún sabiendo mis limitaciones. :)))

      Eliminar
  2. Hola. A. Todas

    Yo, Pienso. Muchas. Veces. En. La. Otra. Vida,


    En. Una. Lectura. De. La. Misa, Creo. Que. De. Isaías, Decía, que. El. Señor, nos. Arrancara. El.


    Corazón. De. Piedra, y. Nos. Pondrá. Un. Corazón. De. Carne, Liberara. A. Los. Oprimidos. Por. El. Diablo

    No. Nos. Trata. Como. Merecen. Nuestros. Pecados,

    Mira. Con. Compasión. A. La. Gente. Que. S. Venga, Si. Tiene. Algún. Trastorno. De. Haber. Recibido. Daño

    Entoces. Pienso, en. Una. Persona. Que. Esta. Diagnosticada. De. EsquizofreniA, Lleva. Con. Este. Problema. 30. Años

    Desde. Los. 14. Años, una. Persona. Que, no. Práctica. La. Religión, que. Parece. Ser. Que. No. Tiene. Conciencia. De

    Pecado, pensando. Todo. El. Día. En. El. Sexo, y, Yo. Me. Imagino. Que. En. La. Otra. Vida, Quizás, el. Señor, le. Librara

    O le. Curara. De. Esa. Opresión. Por. El. Diablo,

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola amiga. En cuanto a lo que comentas te daré mi humilde opinión.
      Yo antes me preguntaba mucho por que sería la otra vida, si de verdad habría algo más, o si yo me salvaría. Después conocí a Jesucristo y muchas de mis dudas se disiparon y fueron respondidas muchas preguntas, no de inmediato, pero el Espíritu Santo que realmente tiene poder para convertir nuestro corazón y hacernos comprender tantas cosas lo va trabajando según yo me dejo hacer. En esto es muy importante querer conocer la verdad, ser honestos con nosotros mismos y poner de nuestra parte. Frecuentar los sacramentos y estar de cara al Señor uniéndonos en la oración y en la libertad de querer conocerle. Constantemente pidiendo el don de la constancia en la oración que nos une de un modo intimo Él y nos hace cada vez más humano nuestro corazón de piedra. Solo así disfrutamos aquí y ahora de ese pedacito de cielo anticipado aquí en la tierra.
      En cuanto a lo que comentas de esta persona, bueno, hay que diferenciar concretamente cada caso. Si realmente es una persona enferma que no distingue el bien del mal por su enfermedad, no peca del mismo modo que lo haría una persona con sentido del pecado. Te cuento una anécdota de mi juventud. Cuando era adolescente siempre pedía el don de discernimiento y un día mi sacerdote se me acerca y me dice: ¿como se te ocurre pedir un don así? Si supieras la responsabilidad y lo complicada que se volverá tu vida si Dios te lo concede (se rió) no lo pedirías. Y aunque me lo dijo un poco en tono de broma, lo decía en serio. Con el tiempo he comprobado que así era. Pues cuanto más capacidad de discernir tengo, más peco, porque más son las veces que pudiendo hacer el bien o elegir una opción que me santifique prefiero el camino fácil y cagarla.
      Gracias a Jesucristo creo que todos podremos alcanzar el cielo. Yo así lo creo firmemente. Creo que su Divina Sangre ha pagado el precio de todas nuestras ofensas y que en el último momento si de verdad frente a Dios Padre le reconocemos a Él como Señor y pedimos realmente perdón por nuestros pecados, yo creo que como Padre y primera persona que nos ama nos perdonará. Aunque también cabe la posibilidad de que no queramos ese perdón, y nos condenemos a una eternidad sin Dios. Muchos niegan ese amor, queriendo o inconscientes y pasan por esta vida sin conocer a Dios. Yo no imagino lo que ha de ser una eternidad sin mirarme en los ojos de mi Amado y sentir su Misericordia. Así que esta persona si no tiene por su enfermedad la capacidad de conocer a Dios, seguro que cuando Él mismo se le manifieste en ese estado del espíritu donde ya la enfermedad, y muchos obstáculos se habrán eliminado porque podremos comprender y entender quienes somos, y porque estamos, creo que esa persona entonces tendrá las mismas posibilidades de salvarse que todos. Yo al menos así lo creo aunque quizás deberías de pedir consejo a un sacerdote o una persona más puesta que yo.
      Un abrazo.

      Eliminar
  3. Lo que no consigas tú querida amiga!!! :)))

    Me alegro un monton por ella,un beso desde aqui. :)

    Un cariñoso saludo amiga mia :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Noooooo....Jajajaa....Yo no, el Señor que es muy grande y se las apaña para darse a conocer, jeje.
      Los demás somos simples peones, algunos con más gracia que otros, pero todos validos y útiles si así nos ponemos al servicio del evangelio.

      Yo es que soy muy "pesá" y si veo un hueco por donde colarme, ay.... aunque sea relatando. Pero no es merito mio amiga, de verdad que no. Lo que si es cierto es que cada vez que me pongo en disposición de ayudar lo voy consiguiendo con más alegría. Que es algo que me preocupaba, que cada vez que tengo que sacrificarme por alguna causa lo hago con mucho esfuerzo y un trillón de mis pataletas y siempre pienso que no sirve para nada hacer algo bien si una lo hace protestando tanto. Pero hasta para eso Jesucristo se las apaña, jeje.
      Un abrazo grandote. ;)

      Eliminar
  4. Permanecer. En. La. Iglesia, hay. Sacerdotes. Que. Le. Surgen. Prejuicios. Con. Los. Feligreses, y hacen. Que se vayan. De. La. Parroquia, ha. Pasado. Em. Mi. Parroquia

    Una. Vez. Dijo, El. Párroco. De mi. Parroquia, a. Veces. Nos. Surgen. Prejuicios, y. Esto. Hace. Que. El. Feligrés. Se. Vaya

    Y. Nosotros. Mismos. Somos. Culpable

    Yo. No. Voy. A. Rezar. Por. J.A.F. CLl. Porque. De. Toda. La. Gente. Del. Blog, La. Ha. Tomado. Exclusivamente. Conmigo

    He. Preguntado. Que. Daño. Ha. Recibido. De. Mi, y. No tiene. Argumentos, será. El. Mal. Que le. Impide. Ser. Amigo

    Y. No. Quiero. Aje. J,A, F C. Reze. Por. Su. Enemistad. Hacia. Mi

    ResponderEliminar
  5. Me. Da. Pena. Escuchar. La. Iglesia. Te. Necesita

    Cuando, Hay. Sacerdotes. Que. Cogen. Prejuicios, a. Los. Feligreses, y. Se. Van. Dolido de. Su. Parroquia, y, cuando


    Pasan. Por. La. Puerta. De. La. Iglesia, Pasan. Retirados. Por. La. Otra. Acera, y. Yo. E son lo. He.visto


    Dejan. De. Escuchar. Misa. En. Esa. Iglesia,


    Creo. Que. EL. Peor. Daño,, Que. Puede. Recibir. La. Persona. Es. El. Un. Sacerdote, puede. Ser. El. Motivo

    De. Mucha. Gente. Deje. De. Practicar. La. Religión, las. Críticas. Al. Sacerdote,

    Yo. Iba. Cruzando. La. Calle. Y. Me. Encontré. A. Un. Sacerdote, y. Uno. Que. Iba. Con. Su. Mujer, cuando. Vio. Al. Sacerdote

    Le. Escuche. Las. Críticas, , Anda. No. Tienen. Que. Pagar. Nada. Este. Cura, o. Algo. Así, que. Me. Quede. Pensando

    Ay. Que. Ver, el. Odio. Que. Tiene. Este. Hombre. Al. Cura


    Monse

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Monse, esto que me cuentas son cosas normales. La persecución va unida a nuestro evangelio. La tribulación, las situaciones difíciles que ponen a prueba nuestra fe son necesaria en la mayoría de los casos. si no asómate a la vida de cualquier Sant@ y verás como todo@s en mayor o menor grado han sido perseguidos.
      En lo relativo a F. no creo que la tenga tomada contigo. Yo no hablo personalmente con él, pero no creo que él la tenga tomada contigo. De todos modos ya sabes lo que te he dicho en otras ocasiones, cuando tenemos un obstáculo que saltar, el mejor impulso nos lo va a dar siempre la oración.
      Lo mismo te digo cuando seas testigo de personas que hablan mal de otros, ya tengan razón o no, no nos toca a nosotros el juzgarles tampoco a ellos, sino rezar para que descubran la verdad y lo equivocados que puedan estar. Y te lo digo porque se que es el camino correcto aunque te confieso que yo no siempre lo tomo.
      Un abrazo.

      Eliminar

Publicar un comentario

☝💬 Las palabras liberan a las personas, deja escrito lo que piensas. Se admiten todo tipo de opiniones, consejos y críticas. Luego ya veré si lo publico...
... o no 😉.