LO QUE NO TE MATA TE HACE MÁS FUERTE.


     No se cuantas veces en los últimos nueve meses me he repetido esta frase. Cuando uno sufre depresiones con intentos suicidas, te levantas y te acuestas con la misma idea en la cabeza y la vida se vuelve una lucha continua por ser más fuerte que esa idea que no deja de martillear en tu cabeza. ¿Cuántas veces me he repetido esta frase? Pufff...

     Apenas me encuentro un poco mejor y tengo que enfrentarme sola a esto. Mañana me quejaré y si hace falta lloraré de nuevo a dúo con mi hija, después de todo, ¿quién dijo que llorar sea malo? Y encima no cuesta dinero. Hoy me quedo con la bendición que se reconocer de la mano de mi Padre. Que aún no ha permitido que siendo una familia de clase obrera baja, y cuando la mayoría de las familias de nuestro nivel ya pasan penurias, a mi hombre le llega el trabajo a casa. Es una bendición para el día de hoy que seria de ingratitud no reconocer, mañana ya Dios dirá. Pero hoy tengo que dar gracias por ello.

     También dar gracias por las personas que el Señor a puesto en este año a mi alrededor, que traen a mi vida cada día un soplo del Espíritu a compartir conmigo. Y tú que lo lees eres parte de ell@s.

     Quiero terminar el día con un chiste que ha conseguido hoy lo impensable, que del llanto pasase a la risa y de la risa, a partirme en carcajadas. Y es que tengo un socio que en verdad yo no se si le sale de potra o es que realmente sabe lo que dice. Pero siempre consigue arrancarme una carcajada, tal vez por que los dos tenemos el mismo humor negro.


EL MARIDO ESTABA EN ESTADO DE COMA. SALIÓ Y ENTRÓ DE ESE ESTADO POR MESES Y, AÚN ASÍ, SU MUJER PERMANECIÓ A SU LADO TODOS LOS DÍAS.

UN DÍA QUE ÉL DESPIERTA, LE PIDE A SU MUJER QUE SE ACERQUE Y CON LÁGRIMAS EN LOS OJOS, LE DICE:

- ¡SABES QUÉ!. SIEMPRE HAS ESTADO A MI LADO EN CADA MOMENTO MALO. CUANDO FUI DESPEDIDO DEL TRABAJO, ME DISTE ÁNIMO, CUANDO MI NEGOCIO QUEBRÓ, ESTUVISTE AHÍ, CUANDO ME TIROTEARON, ESTUVISTE A MI LADO, CUANDO PERDIMOS LA CASA, TE QUEDASTE AQUÍ MISMO, CUANDO MI SALUD EMPEZÓ A DECAER, ESTABAS AHÍ MISMO, A MI LADO... ¿SABES QUÉ...?

- ¿QUÉ, QUERIDO?, PREGUNTÓ ELLA SONRIENDO, A MEDIDA QUE SU CORAZÓN SE LLENABA DE TERNURA...

- PA MÍ... QUE TÚ ME TRAES MALA SUERTE!!